No, no se trata de Macri, ni de Ricardito, ni de Sanz (nuestro pollo).
Tampoco de Duhalde, Solá o cualquier otro candidato del Peronismo Federal (no me gusta llamarlo disidente).
Siquiera de Lilita, o de Pino.
Lo único que puede afectar negativamente a Cristina, o cualquier otro candidato K que intente reemplazarla, es la vieja conocida y traicionera inflación.
Curiosamente, hace casi exactamente un año escribíamos acerca del principio del fin del Kirchnerismo. En el post, se hacía referencia a la importancia de lograr cierta aceptación en la esquiva clase media, como prerrequisito para un triunfo en 2011. Y, apelando a un consultor de opinión, se sostenía en aquél entonces que si se disparara la inflación, podría producirse un divorcio entre la clase media y el Kirchnerismo.
Por supuesto, se trataba de un contexto político (y electoral!) muy distinto.
Además, aún con la oposición más poderosa en el Congreso, el 2010 terminó siendo, irónicamente, un gran año para el Kirchnerismo; al menos en términos de batallas políticas y de imagen.
De cara al 2011 (btw, nombre de un gran blog amigo), es nuevamente la inflación la variable que más hace peligrar un triunfo oficialista. Mucho más que el crecimiento de la imagen de algún político opositor, lo que más debiera preocupar al búnquer de Cristina es el crecimiento de la inflación.
Analistas privados ubican las expectativas de inflación en torno al 30% para este año. En nuestro último post de coyuntura económica, hacíamos referencia justamente a un umbral de inflación acercándose a las tres decenas.
Rollo hoy sostiene, aquí, que la inflación del 2010 se ubicó en torno al 26%. Preguntas: ¿cómo se enfrían las expectativas inflacionarias con un Indec intervenido? ¿Cómo se frena una espiral ascendente para 2011, partiendo de un piso de 26% en 2010?
El remedio de Moreno en el Indec termina siendo peor que la enfermedad: ya nadie cree en las estimaciones oficiales de inflación, por lo que se termina avalando, así, toda estimación privada. Paradojas K.
Se sabe: hay 8 provincias que poseen estimaciones de inflación "independientes". La divergencia de las medidas de inflación de estas provincias, y el IPC del Indec es, mes a mes, creciente. Ved el caso de Jujuy, por ejemplo.
Mal que le pese al Bloque A, la verdadera Oposición al proyecto Kirchnerista no se encuentra en ningun partido político alejado del FPV...
---------------------------
Que el 2010 haya sido un gran año para el pais, es porque el gobierno no le dió importancia a la oposición, ni a Clarín, ni a los intentos de fijarle la agenda. Por suerte, lo que hay que hacer (o no) lo decide la Presidenta, para eso la votamos.
ResponderEliminarLos que opinan de afuera, cuando ganen una elección que hagan lo que quieran, aunque estrellen el pais al año.
Quienes son los analistas privados? o mejor dicho, para quienes trabajan?
La oposición está perdida, no tienen proyecto alguno. Son menos creibles que el tan criticado Indec.
Muchas gracias por la cita.
ResponderEliminarLa inflación es el enemigo número 1, una lástima que el Gobierno no se de cuenta.
De todas formas 2011 va a pasar sin sobresaltos, el problema se puede generar en 2012.
saludos!