Llamen a Suiza por el fifty-fifty

Ya en la invitación que cursó la empresa Covelia para la inauguración de una nueva planta se mencionaba la confirmada presencia del líder de la CGT.

Recordemos que menos de un mes atrás, un exhorto suizo tensó la relación del gobierno con la CGT de Moyano. La historia es conocida, Hugo amenazó con un paro, harto de las "mentiras y calumnias" que se escribían sobre su persona y los supuestos vínculos con Covelia. El paro finalmente no se realizó, pero Moyano hizo llegar su mensaje.

Eso sí, para disipar las dudas existentes sobre sus vínculos con la empresa, Moyano había sostenido, categórico: "No tengo un carajo que ver con Covelia".

Sin embargo, ayer estuvo presente en la inaguración de la nueva planta de Covelia, y se ubicó ubicado en el escenario al lado de la principal autoridad de la firma, Ricardo Rubén Depresbiteris (a quien la justicia suiza le congeló fondos por casi US$ 2 millones por sospechas de lavado).

Pero además fue el propio Moyano (y no Depresbiteris) quien anunció lo que el mismo catalogó de hecho histórico:

"Covelia será la primera empresa en la Argentina en repartir sus ganancias con los trabajadores, los verdaderos responsables de la ganancia. Ahora seguro que trabajarán más, con más esfuerzo. (..) Nunca las empresas ganaron tanto como hasta ahora. No deben ser egoístas. Covelia gana dinero y lo quiere compartir".

Si bien está aún lejos del fifty-fifty reclamado por Moyano en el acto realizado el Día del Animal en la 9 de Julio, es un hecho que Covelia repartirá entre sus 3.000 empleados el 10% de sus beneficios netos. Es decir que por el ejercicio cerrado en 2010, cada uno de los empleados de Covelia recibirá $ 1.600 pesos como bonificación especial.



Y todo esto, mientras Moyano continúa con sus reclamos por cargos y puestos en las listas para las próximas elecciones...


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